Como ya sabéis la comida le da un toque especial a los viajes. Una forma de descubrir un país en profundidad. Así que paso a contaros lo bien que no lo pasamos degustando la gastronomía griega.
Cenar con música en directo
Uno de mis lugares preferidos a lo largo de nuestro viaje fue el bar Kafeneion 111. Fuimos a cenar porque sobre las 9 y media empieza a tocar un grupo en el interior de local, aunque se puede escuchar desde fuera.
Nosotros estuvimos en verano y el ambiente de la terraza era muy bueno y la comida bastante rica. Como llegamos pronto para poder coger sitio empezamos pidiendo unas bebidas hasta que el hambre empezara a llamar a la puerta.
Cenamos por 24,50€ dos personas. Pedimos una ración de patatas, estábamos enamorados de las patatas fritas en está ciudad. Siempre eran caseras y estaban riquísimas. También pedimos uno buñuelos de calabacín típicos de a gastronomía griega y strapatsada.
Os dejo la localización del local para que os sea más fácil encontrarlo por si queréis reservar o ir a cenar. Espero que os guste.
Dopios, la gastronomía moderna
Una de nuestras primeras noches decidimos parar a cenar un lugar tranquilo donde tomar algo ligero porque lo habíamos dado todo en la comida y la merienda. Acabamos en Dopios un bar tranquilo con música de fondo donde probamos los buñuelos de bacalao, unas croquetas de queso y hummus.
La cena nos costó 27€ con bebidas y pan variado. El pan no lo pedimos, pero nos lo cobraron y era necesario porque el hummus venía solo sin ningún acompañante. Entonces o te lo comías con cuchara o tocaba pan. Los buñuelos de queso estaban muy ricos, pero los de calabacín algo fuertes para nuestro gusto.
Lukumades, buñuelos griegos
Los lukumades me sorprendieron mucho. Al principio los pedí porque quería probarlos por ser típicos, cuando los vi y los olí con tanta miel y canela dije ¡uy!, pero están riquísimos.
Yo me pedí los clásicos y estos no se pueden pedir mezclados, así que solo puedes pedirlos de un sabor. Vienen diez unidades y tienen un precio de 3,90€. Te recomiendo que los pruebes, entran solos.
El local es una lotería porque es super pequeño, entonces hay veces que la cola en inmensa y otras que entras directamente. Hay un par de mesas en el interior de local y unas cuantas mesas fuera.
Café Veneti, los mejores bocadillos
Se que suena curioso que en un blog de viajes donde se recomienda comida se recomienden bocadillos, pero la verdad estaban deliciosos y para nuestra escapada a Moni Island nos vino genial, la verdad. También comimos en nuestro último día allí, estaba muy cerca de nuestro hotel y comimos antes de irnos hacia el aeropuerto.
Este bocadillo fue mi preferido. Estaba delicioso y sigue estando bueno después de tenerlo varias horas en la mochila. Me lo pedí en dos ocasiones. La primera vez que comimos allí, pedimos una hamburguesa de ternera, el bocadillos y dos refrescos y nos costó todo 18,75€. El servicio en mesa es bastante lento, eso si que es cierto.
Hay varios Veneti por Atenas, yo te dejo el Veneti en el que nosotros estuvimos.
Pastelería en Atenas
Como os comentaba antes, uno de los días nos fuimos de excursión a una isla y la vuelta se retraso más de lo esperado. Cuando llegamos no teníamos ganas de ducharnos y salir a cenar, simplemente querías coger algo para comer y llegar al hotel. Cerca de nuestro hotel encontramos una pastelería/bar que cierra bastante tarde y que tiene cosas bastante buenas.
Aquí probamos el pastel griego de espinacas, el baklava y los koulouris. ¡Muy ricos! Bueno yo la verdad es que desayunaba todos los días koulouris, pero para mi sorpresa todo estaba muy bueno. La textura de la masa filo de la spanakopita estaba perfecta.
También tienen helados, bocadillos y raciones de pizza para llevar o tomar en la terraza que tienen.
Helados deliciosos
No voy a negarlo, este cuerpo serrano iba a casi 2 helados por día, digo casi porque hubo algún día que no comí, porque estaba de excursión, pero vamos que sí. Soy una buena catadora.
En Atenas fui varias veces a Solo Gelato porque me gustó mucho la primera vez y pues repetí. No me importa repetir. Los cucuruchos están muy buenos, son de galleta de gofre muy ricos. Un cucurucho de una sola bola cuesta 2,90€.
Cosas que me sorprendieron mucho de Atenas es que el precio del agua es bastante barato tanto en restaurantes como puestos en la calle y que los helados también lo son.
Espero que os gusten tanto como a mi todos estos platos. Si tenéis cualquier recomendación para futuros viajes, no dudéis en ponerlo en comentarios.